Tres casos exitosos que contribuyen a la gestión territorial Taraco, Palos Blancos y Salinas
En este marco, el proyecto Interactuando con Territorios Vivos (ITV) — implementado en colaboración con la ONG belga ECLOSIO y las ONG bolivianas TIERRA, APROSAR, AOPEB y REMTE, y financiado por la Dirección General de la Cooperación Belga— se planteó el desafío de contribuir al fortalecimiento de procesos de gestión territorial, agroecología, alimentación sana y género, a través de la promoción del ejercicio de los derechos de los pueblos indígenas y el reconocimiento del pluralismo nacional en tres regiones del país: Taraco, Palos Blancos (La Paz) y Salinas (Oruro). Con este fin se adaptaron estrategias y metodologías concertadas y de amplia participación social que dieron relevancia a la autogestión y la autodeterminación de los pueblos.
En este marco, se desarrollaron importantes avances y contribuciones para la facilitación, asistencia técnica y seguimiento, por ejemplo, del Estatuto Autonómico Indígena Originario de Salinas, en Oruro, o el trabajo del CAOTM en Taraco y las escuelas ecológicas en Palos Blancos del departamento de La Paz, acciones en las que están presentes el tema de género (REMTE) y otras normas de gestión territorial, seguridad y soberanía alimentaria, alimentación saludable y medio ambiente. Estas labores fueron promovidas localmente para la implementación de modelos (aún en construcción) de desarrollo humanizados y que revaloricen los saberes ancestrales, el rol de la mujer, la igualdad de oportunidades, el respeto a la diversidad y al propio medio ambiente como fundamento de la estructura cultural de estos pueblos indígenas.
En este marco, se desarrollaron importantes avances y contribuciones para la facilitación, asistencia técnica y seguimiento, por ejemplo, del Estatuto Autonómico Indígena Originario de Salinas, en Oruro, o el trabajo del CAOTM en Taraco y las escuelas ecológicas en Palos Blancos del departamento de La Paz, acciones en las que están presentes el tema de género (REMTE) y otras normas de gestión territorial, seguridad y soberanía alimentaria, alimentación saludable y medio ambiente. Estas labores fueron promovidas localmente para la implementación de modelos (aún en construcción) de desarrollo humanizados y que revaloricen los saberes ancestrales, el rol de la mujer, la igualdad de oportunidades, el respeto a la diversidad y al propio medio ambiente como fundamento de la estructura cultural de estos pueblos indígenas.