En abril de 2011, indígenas y campesinos debatieron sobre sus perspectivas en torno al control de los territorios de colindancia
Trabajo conjunto ayudará a prevenir conflictos por la tierra y los recursos

“¿De qué sirve pelearnos entre nosotros si tenemos necesidades comunes?”, reflexionó un indígena Mosetén frente a una veintena de asistentes en un conversatorio organizado por la Fundación TIERRA y realizado el 12 de abril en la ciudad de La Paz.

Un compañero de este indígena completó la cavilación con la siguiente frase: “Queremos hacer nuestro desarrollo agropecuario. No queremos quedar así nomás como antes. Estamos apoyando a nuestros hijos para que no sean como nosotros, para que estudien; que ellos sean algo”.

Con criterios semejantes, representantes de las tierras comunitarias de origen (TCO) Takana I y Mosetén, del norte de La Paz, y del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), entre Beni y Cochabamba, compartieron sus percepciones sobre la convivencia con comunidades de migrantes de tierras altas que ocupan predios aledaños a sus territorios y que están agremiados en sindicatos de comunidades interculturales.

En el conversatorio, indígenas y migrantes presentaron disertaciones con sus puntos de vista. Los ponentes indígenas fueron: Marcelino Chairique, presidente de la Organización del Pueblo Indígena Mosetén (OPIM) y Orlando Morales, técnico de la OPIM;  Jesús Leal, presidente del Consejo Indígena del Pueblo Takana (Cipta) y Neide Cartagena; e Isidro Yujo, vicepresidente de la Subcentral Indígena del TIPNIS.

Especial

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Las presentaciones de las  comunidades interculturales estuvieron a cargo de: Serapio Marca, secretario de Tierra y Territorio de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales de Bolivia; y David Herrera, ex dirigente de la zona de colonización del TIPNIS.
El camino a seguir

Los invitados a este encuentro tenían la nada sencilla misión de identificar las claves que ocasionaron un sinnúmero de dificultades en su vida cotidiana.

Al inicio del conversatorio, si bien salieron a la luz los detalles más duros de esta convivencia: peleas, enfrentamientos, pugnas y malos entendidos; conforme transcurría la jornada, los disertantes se miraron a la cara y, aunque con ciertas dudas, identificaron diversos factores que les permitirían solucionar sus desavenencias.

En el encuentro, tanto indígenas como migrantes se acusaron de invasiones a territorio ajeno para extraer madera y comercializarla. El dirigente de la TCO Mosetén, Marcelo Chairique, aseguró: “Semanas atrás, hemos detectado a un grupo de colonizadores que estaban talando el bosque. Hemos desarmado seis campamentos en nuestro territorio”.

En esta línea, el ex dirigente de la zona de colonización del TIPNIS, David Herrera, aseguró que el principal interés de su sector está relacionado con la siembra de coca y que la tala ilegal es una práctica que corresponde a los indígenas del área protegida. “Los indígenas de la TCO talan los bosques, incluso una Subcentral indígena, que se peleó con la Subcentral más antigua, avaló la tala de los bosques. Es más, nosotros (los campesinos) hemos impedido, en más de una ocasión, el paso de los traficantes”.

Pero más allá de las ironías y los cuestionamientos, lo cierto es que los pobladores están preocupados por el futuro de los bosques y sus tierras. Por ello se mostraron predispuestos a buscar soluciones conjuntas. “Tenemos que trabajar juntos en el control de la tala ilegal y sancionar a quienes cometen estas acciones, con nuestros usos y costumbres”, resumió el indígena representante de la TCO TIPNIS, Isidro Yujo.

Otro de los problemas identificados en la jornada de abril fue el de la pugna por el uso de la tierra que también ha suscitado confrontaciones; las que incluso han terminado con la vida de colonos e indígenas. En septiembre de 2009, un enfrentamiento entre cocaleros e indígenas del TIPNIS derivó en la muerte de un colono que, en compañía de otros centenares de familias, intentó sembrar la hoja en el área de la propiedad colectiva.

En parte, estas disputas, se suceden porque los límites entre TCO y propiedades interculturales no están muy claros. “El pueblo mosetén está rodeado de puro hermanos colonizadores. Pero donde está saneada la tierra no hay problema, son las orillas que faltan titular. En Sapecho y Palos Blancos están tituladas y no hay problema; con esos dirigentes se comparte el desarrollo”, comentó Orlando Morales, ex dirigente de este pueblo indígena.

El ex dirigente cocalero del TIPNIS, David Herrera, coincidió con esta idea y recordó que el proceso de delimitación entre el territorio indígena y las parcelas campesinas se realizó durante las anteriores dos décadas con la participación conjunta de ambos sectores. “Hemos trabajado en la línea demarcatoria [tramo convencional que separa a indígenas y colonos] y hemos acordado que no pasaremos la “línea roja”. Los afiliados conocen el límite y es como una ley para nosotros” y añadió que la mencionada incursión de 2009 estuvo protagonizada por productores ajenos a los 52 sindicatos de la zona colonizada del TIPNIS.

En todo caso, Isidro Yujo, reclamó que la labor elogiada por Herrera fue una “trampa porque los indígenas perdimos territorio en el TIPNIS”. De todas maneras reconoció que esta acción impidió mayores disputas.

Con un contrapunteo similar continuó el conversatorio de abril y al finalizar la reunión indígenas y representantes de las comunidades interculturales solicitaron a las instituciones estatales, las grandes ausentes en sus regiones, su apoyo para hacer realidad los planes de trabajo común hasta encontrar planes que beneficien a todos los habitantes, pero en el marco del respeto a sus particulares formas de vida.

Como conclusión del conversatorio, el ex dirigente Herrera abogó por la conformación de un consejo que represente a todas las partes que ocupan los territorios.

“El Consejo tiene que coadministrar y mediar entre los conflictos. Nosotros (colonos) tenemos nuestras reuniones, pero no hay un consejo que atienda a todos los sectores involucrados”.

Resultados del conversatorio del 12 de abril de 2011