Pronunciamiento

Vamos a decir claro y fuerte. Los incendios forestales de la Chiquitanía y Amazonía boliviana tienen su origen en la expansión irracional de la frontera agropecuaria. Desde el año 2010, el Gobierno de Evo Morales y los agro-rentistas se aliaron para consolidar las grandes propiedades de la tierra, masificar el modelo soyero, producir agrocombustibles y exportar carne a China. Ambos actores divulgan la falsedad de que la agricultura extractiva llenará el vacío que empieza a dejar los hidrocarburos y de que ésta –con un pequeño empujón estatal– se convertirá en una nueva locomotora de la economía nacional.